Santa Lucía en Siracusa

Santa Lucía en Siracusa
Altar Capilla Santa Lucía, Catedral de Siracusa ©El Exquisito
Mesa Editorial / December 13, 2024
  • La ciudad de Siracusa, en Sicilia, conmemora cada 13 de diciembre a Santa Lucía. Es una combinación tradicional de fiesta religiosa y popular en honor a la Santa Patrona que caminó resuelta hacia el martirio en el siglo III, durante la persecución del emperador Diocleciano.

    Las ceremonias comienzan a finales de noviembre, con una marcha de la banda musical a manera de anuncio preparatorio para el 9 de diciembre, cuando se instala el simulacrum, la efigie en plata de la Santa en la Capilla dedicada a ella en la Catedral; obra de Pietro Rizzo, quien empleó 190 libras de plata en la creación, la cual fue terminada en las primeras décadas del siglo XVII.

    La estatua reposa sobre una caja también elaborada en plata y que consta de seis paneles en los cuales se representan episodios de la vida de Santa Lucía; obra atribuida a Nibilio Gagini. En el pecho de la estatua se guarda el relicario de la Santa, donado por el padre jesuita Bartolomeo Petracci al Senado de Siracusa en 1605.

    Capilla de Santa Lucía, Catedral de Siracusa ©El Exquisito

    El 13 de diciembre propiamente se hace la procesión de las reliquias de la Santa y la efigie hacia la Basílica del Sepulcro de Santa Lucía, erigida en el lugar donde fue martirizada. Durante la procesión mucha gente lleva velas encendidas y canta “Siracusana jè!” (¡Ella es siracusana!).

    La entrada a la Basílica se anuncia con campanas y la imagen es escoltada con doce cirios de madera decorados con flores. Allí permanece durante la Octava de Santa Lucía, es decir hasta el día 20, cuando es llevada de nuevo a la Catedral en otra procesión que hace un alto en el Santuario de la Madonna delle Lacrime, y al paso por el puente Umbertino, recibe un saludo cívico con fuegos artificiales.

    Detalle imagen Santa Lucía, Catedral de Siracusa ©El Exquisito

    En la Catedral se encuentran varias imágenes de la Santa. La Capilla es particularmente bonita, realza la devoción tan antigua a la Santa, sobre la cual existen registros desde el siglo V.

    Actualmente, cada primer domingo de mayo, la ciudad hace otra procesión para recordar con la Santa los eventos milagrosos de 1646, cuando Siracusa, como Palermo, sufrían un periodo de hambruna en tiempos de la dominación española. La tradición dice que el 13 de mayo de ese año, estando los fieles congregados en Misa en la Catedral de Ortigia (el centro histórico antiguo de Siracusa) una codorniz pasó volando. En ese momento, entró un mensajero a la iglesia anunciando el arribo de barcos cargados con granos de harina. (El nombre Ortigia, a propósito, viene del griego ortyx que significa codorniz).

    El anuncio fue recibido como un milagro y, en agradecimiento, la costumbre en Siracusa es prepararse para la Fiesta del 13 de diciembre absteniéndose de comer pasta y consumiendo únicamente trigo de grano no molido en un plato especial llamado cuccia. La versión de cuccia dulce con naranja es una receta tradicional por las fiestas, e incluye canela y miel.

    De diversas maneras, fieles de muchos otros lugares del mundo observan estas fechas. Es la señal de la importancia de este culto antiguo que continúa iluminando los días de diciembre a los fieles que honran la memoria de la joven mártir siracusana con todo el simbolismo asociado a su nombre: luz.