La celebración tiene origen en Beltane, un festival que, en el calendario celta marcaba el comienzo del verano y se recibía con fogatas. Como en el caso de otras fiestas similares, ha ido cambiando con el paso de los siglos pero, en general, asociado siempre con renacer, con baile, bebida y disfrute alrededor del ‘maypole’, postes de los cuales penden cintas de colores. Todo con alegría, a veces demasiada, tanto que en algunas épocas de siglos pasados ha estado prohibido.
Para muchas personas, especialmente los estudiantes valientes, May Day empieza la noche anterior, 30 de abril, con una fiesta que se prolonga hasta que los más resistentes están preparados para caminar desde antes de las cinco de la mañana hacia Magdalen College, colegio que hace parte de la Universidad de Oxford. Allí, un coro se prepara para subir la torre del campanario del colegio y entonar los cantos en latín propios de la celebración de May Morning, Mañana de Mayo, incluyendo el Himnus Eucharisticus. La torre se empezó a construir en 1492 tiene 172 escalones que premian al final con una de las mejores vistas de la ciudad. En el siglo XIX, el historiador del Colegio, John Bloxam, re-inventó la costumbre de May Morning en Magdalen que ya tenía antecedentes desde siglos atrás.