Sin dejar de mencionar el tiempo nublado, gris y lluvioso -inevitablemente, tratándose de las Islas Británicas- que acompañó el puente de la Coronación (6-8 de mayo), y haciendo la salvedad de algunos estupendos ratos de sol por algunos lugares, distintos festejos populares se llevaron a cabo alrededor del país con juegos, comida, bebida, música, y algunos señores en zancos.
En la ciudad de Swindon, al sudoeste inglés, la calle Woodstock fue uno de los centros de reunión con mucha asistencia y actividad. Apropiadamente, el pub ‘The King’s Arms’ hizo de anfitrión principal, con decoraciones festivas, y un puesto sobre la calle para hamburguesas, perros calientes, cupcakes y, para que no quedara duda del motivo, el Quiche del Rey y la Reina Consorte, el platillo escogido por los reyes como conmemorativo de su coronación.
El King’s Arms se encuentra en la mitad de la calle, en un edificio originalmente construido en 1835, en donde funcionó anteriormente una panadería que tenía su propio molino en el jardín trasero. La cervecería Arkell’s lo compró en 1885.
Por su parte, la histórica ciudad de Gloucester tuvo también celebraciones. Un servicio de Acción de Gracias en la Catedral, el ’Town Crier’ en traje típico, campana en la mano, juegos y comidas en el sector del puerto.
Buzones de correo ‘coronados’ con tejidos a mano, vitrinas de tiendas de mascotas con banderas, en fin, la coronación también en la calle. Como es tradicional, distintas cervecerías sacaron ediciones especiales para la ocasión. El contingente de El Exquisito desplegado para el trabajo estrictamente periodístico probó algunas, y entre ellas, se alegró con la frescura y muy buen sabor de la cerveza conmemorativa Coronation, que recomendamos.
